Continuando con el rescate (O respaldo, quizá) de mis escritos antiguos de juventud añorada, dejo éste que personalmente me impactó por el quiebre emocional que tiene xD No lo sé, es raro. A mi me gusta, tiene algo. Espero que usted le encuentre ese algo, también.
Fueron los dias en que tu mirada de pudú se metia con injusticia en mi corazón, desordenándome todo lo que había armado y levantado para protegerme de mi mismo, de ti misma, de lo que tu fuiste para mi. Fuiste la mujer más divertida, la sonrisa más rica, tus dientes multicolores se colaban con audacia entre mis labios, me hipnotizaban tus mejillas redondas y atravesar las calles recitando y cantando poemas para verte me parecía lo que el pan no me podía dar.
Hubo un día en que te encontré fea. Y nunca más quise saber de tí. Tu mirada de cocodrilo y tu piel de bototo se volvieron ásperas y perdí toda mis ansias por querer verte. Hubo un día que te encontré fea y siempre fuiste la peor para mí. Quise irme de alli, calladito, en silencio sin decir palabra alguna del discurso de rabia que mi corazón habia escrito para tí. Nunca supiste lo que yo queria decir, nunca pudiste oir a otra persona que no hayas sido tú. Si, te encontré fea por eso. Me aburriste y tu sonrisa se convirtió en un chiste fome, las mejillas que un día amé se volvieron monótonas, como con várices de vieja, y atravesar las calles recitando chuchadas para no encontrarme contigo se convirtió en lo que cualquiera llamaría -depeción, enojo, rabia, hipo, conchetumadre- .
Si creyeras que este poema sucio es para tí - no lo creas. Me da lo mismo lo que hoy tus pupilas mentirosas rajen, hoy, yo gano más, y tu pierdes.
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