Bastará un soplido para que la fragilidad de mi mente se vuelva a desplomar
no sé - no sé lo que haré, ni tan siquiera sé lo que estoy haciendo
siento la seguridad y la inseguridad balanceadamente,
siento cómo hay una guerra sin tregua entre mi optimismo y mi realismo
los dolores de cabeza se hacen cada vez más seguidos... y en lo más profundo de mí,
quisiera morir a ciertas horas del día, para volver a existir en la noche en forma incorpórea y voladora.
No quiero tener miedo.
Y hoy estoy seguro de no volver a sentirlo.
 
No hay comentarios.:
Publicar un comentario