
¿Lo recuerdas, mi amor? Esa noche del concierto, cuando nos encontramos y entramos al teatro. Buscamos un buen lugar y nos sentamos en el suelo, esperando el show. Tocaba la banda "Vigilante", el vocalista pelaito, decía "¡mierdaaa!" a cada rato, y nos reíamos, y nos bésabamos mientras la música punchpunchrangwaa sonaba fuerte y pegajosa. Apenas terminó el show del telonero, hubo música de interludio... algo nada que ver con la música que fuimos a oir. Hasta que apareció Tilo y sus amiguitos en el escenario, nos volvimos a besar, me abrazabas, oye, ¿Te acuerdas?, cuando tocaron "Bresso" y aquel momento se hizo inolvidable, ¿Lo recuerdas, amor?, cuando nos tomamos de la mano y nos besamos con el sonido del piano de fondo, y Tilo Wolff susurrando "Noch immer...", ¿Ves que lo recuerdo?, ¿Lo recuerdas tú?, si, fué hermoso, uno de los momentos más hermosos que he vivido contigo, preciosa, un momento que debió haber durado mucho más. Estaría hasta ahora viviendo esa escena... Sabes que esa canción es para tí. Sabes lo que pienso de tí cuando te extraño tanto. Lo sabes con esa canción, sabes que mi corazón se ahoga de a poco hasta que te veo, y se da el tremendo respirón. ¿Te acuerdas que lo pasamos hermoso aquel día? Pusiste tu oído en mi pecho y oíste mi corazón, diste golpecitos en mi costado siguiendo el compás, tal como lo hacía yo contigo, ¿Sabías que me emocionó eso?. Fué una noche hermosa, una noche preciosa. Cuando terminó el concierto caminamos por allí, nos sentamos un ratito hasta que el señor guardia nos hechó pafuera. A la salida me hiciste un obsequio hermoso que pondré en mi habitación. Salimos y nos perdimos entre la gente, nos ocultamos como dos pequeñas sombras enmedio de la gran sombra grande caminante que se exparcía por toda la calle: corrimos hasta una calle extraña y buscamos al tumulto. Llegamos a Plaza Italia y entre la gente esperando micro, me abrazaste fuerte y me dijiste "no me dejes nunca". Y no te dejé, por que nuestros pasos se inclinaron hacia unas cuadras de aquel lugar, donde los colectivos pasaban rajaos y se detenían a tomar pasajeros. Abordamos uno y abrazados en el camino, te quedaste dormida en mis brazos. No creo que lo recuerdes, estabas muy cansada, era muy tarde. Tu aroma se aferraba como nunca a mí, eramos sólo nosotros de pasajeros en aquel colectivo, junto a una señora que se bajó antes que nosotros. Cuando llegamos, habías despertado y caminamos unas cuadras hasta mi casa, entramos a mi habitación y al descanzar, apagamos la luz. Dormimos muchísimo, con un lindo recuerdo, con la hermosa experiencia, además, de haberte secuestrado. ¿Lo recuerdas, mi amor? Que tú te aferraste a mi pecho y dormimos hasta muy, muy tarde...
 
No hay comentarios.:
Publicar un comentario