Haber. Estoy viendo una serie, muy triste, en realidad muy corta-venas, cuyo nombre no diré para que NO LA VEAN y no lloren como nena, como yo. Lo peor es que al parecer puedo llegar a ser tan masoquista que sigo bajando los capítulos, uno tras otro, sabiendo el final, y sabiendo que sufriré viéndolo. Es como cuando ves la película Titanic una y mil veces, y juras que "esta vez" Rose y Jack se salvarán, y tendrán muchos hijos y vivirán hasta viejos en gringolandia. Pero no, no, no es así, no sé como se llamará, pero no es masoquismo, es... tal vez una enfermedad rara que se manifiesta con síntomas como desesperación, inconformidad, ansias de experimentar un sentimiento doloroso (masoquismo igual?), entre otros. Me acuerdo que hace muchos años (muchos), yo pertenecía a una tribu urbana muy cuática que se hacen llamar
Góticos, por el simple hecho de que me sentía identificado con la ambientación melancólica que estos tipos le ponen a su literatura, su música, sus huevás varias, pero después me aburrí, y notoriamente se me nota el cambio drá

stico entre los colores grises-opacos-negros, con la chillona forma que tengo de pintar mis cosas ahora. De hecho mi pieza es gris, por que en esa época me gustaba el gris... ahora encuentro que es el color más aburrido de la galaxia ENTERA, deseo pintar mi pieza de color celeste guagua (azul cerúleo). Es que en verdad es como fome, vivir con tanta opacidad la vida, aparte se vive sin salud, uno se llega a enfermar muy seguido, me incomoda estar con personas amargadas, suena feo, quizás egoísta, pero no puedo hacer mucho por cambiarlo. Me apesta cuando hay personas que todo le cae mal, todo le parece mal, piensan que todo el mundo es idiota menos ellos. ¿Cómo podrán vivir si no socializan?, osea, no se trata de ser extrovertido al máximo, gritar de una esquina a otra... pero sí atreverse a sonreír. Sonreír lo es todo :B, lo digo por que me han sonreído viejas en la calle cuando les hago un gesto happy con la cara, y alegra el día, se arregla de mucho el ambiente... No me considero extrovertido, tampoco antisocial. Me acuerdo que en mi ex-colegio, había un niño cuyo nombre no diré... que era muy extrovertido, al punto de parecer un hueón metiche que no se perdía una, de hecho, cuando aparecía en algo le gritaban "¡Piérdete una!" y se reían, por que estaba como en constante búsqueda de una identidad para adaptarse a la gente... y eso es malo. Por que cuando estaba con un grupo de metaleros, se creía metalero, cuando estaba con los flaites, escuchaba cumbia villera y hueás así, era un fiasco, una mierda de hombre... Había en mi colegio otra persona cuyo nombre tampoco diré (por que no recuerdo como era), que manejaba bien a las masas, con tranquilidad, se acercaba a los grupos pequeños, a los grupos grandes, era capaz de conversar con todos por igual, una persona que siempre admiré C:.
Igual me desvié del tema, la cosa es que faltan como 14 minutos para que se termine de descargar la primera parte de mi TRISTE serie, que estoy esperando con muchas ansias @.@, no porque quiera llorar, sino por que... no sé. Quedé metido con la historia, sé que no puedo evitar que la historia termine así, aún así la veré y se la recomendaré a ciertas personas fuertes, como yo. XD
No hay comentarios.:
Publicar un comentario